La mansedumbre y la humildad, ablandan los corazones más duros, quita la ira y el enojo más grande y evita que lleguemos a tener amargura en nuestro corazón. Es bueno que aprendamos a cultivar este fruto en nuestras vidas, que dejemos que el Espíritu Santo haga la obra, que Dios moldee nuestro carácter y que aprendamos a depender más de él cada día.
La mansedumbre es importante
para:
- · Para recibir la Palabra de Dios.
- · Para dar una testificación eficaz.
- · Ella misma da gloria a Dios.
- · Agradamos a Dios.
Me gusta mucho una frase que dice Nancy
Leigh DeMoss dice que No
hay nadie, de naturaleza, mansa de espíritu. La mansedumbre es sobrenatural. Es
una expresión del carácter de Cristo. Es parte del fruto del Espíritu. Es una
gracia que el Espíritu obra en nuestras vidas.
Toma un
momento
Hoy Medita en la forma en que
Jesús fue manso y como puedes aplicarlo a tu vida.
Al aprender a ser manso, recibiremos mayor gracia de parte de Dios y recibiremos la tierra por heredad, recibiremos las mayores bendiciones que Dios tiene para nosotros.
Al aprender a ser manso, recibiremos mayor gracia de parte de Dios y recibiremos la tierra por heredad, recibiremos las mayores bendiciones que Dios tiene para nosotros.
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