Motivo de
ayuno: para que el padre nos
dé un corazón nuevo, limpio y un espíritu recto.
Confesaos vuestras
ofensas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados. La
oración eficaz del justo puede mucho.
Santiago 5:16
El corazón del que ora
Es importante
reflexionar que hay en nuestro corazón
porque Dios escudriñas los corazones y si nuestro corazón no está alineado a
él, nuestro padre no va a escuchar nuestra oración, debemos estar atentas y
saber dónde está, cuál es la motivación de nuestro corazón, porque donde esté
nuestro tesoro allí estará también nuestro corazón (Mateo 6:21).
Para tener una
buena relación con Dios debemos de cuidar nuestro corazón como un gran tesoro,
él sabe realmente que lo que le pedimos y lo que sentimos, por eso debemos de
ser sinceras con el padre ir delante de el con un corazón limpio y humilde.
En el corazón del que ora no debe haber:
No hay pecado sin
confesar y limpiar
No ora para su propio beneficio
No hay falta de perdón
No descuida a su familia
en oración
No es jactancioso, altivo ni rebelde
No es jactancioso, altivo ni rebelde
Bienaventurados
los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios.
Mateo 5:8
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